
Yo soy tu templo y Tú eres mi dicha, mi amor, mi redentor, mi protector. Sé que, si confío en Tí, nada me faltará porque Tú todo lo puedes en Tí. Desde que nací a la vida habitas en mí y sostienes mi alma y mi cuerpo.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado
Esta entrada fue publicada en
Oración. Guarda el
enlace permanente.
Vale la pena darlo todo y arriesgarlo todo por Jesús. Él no se dejará ganar en generosidad y nos recompensará mucho más de lo que podemos pensar o imaginar. Él nos hará santos, que es lo máximo que podemos desear.
Querida Maribel que Dios te bendiga y te dé la gracia de la plena confianza y del abandono total. Que seas santa y puedas decir, de verdad, en cada momento de tu vida: ¡Jesús, yo confío en Ti!
Abrazos,
Betsi.
Siempre Dios está con nosotros, acompañándonos y protegiéndonos. Saludos
Ana
Amén. Que Dios te bendiga.
» Solo Dios basta»…
Gracias por compartir esta oración.
Un abrazo
http://corrientita.99k.org/