Compadécete de los que viven lejos de Dios porque no han hallado la Vida. Compadécete de ellos porque, a pesar de no haber bajado a los infiernos, no son capaces de subir al cielo; ten piedad de ellos y ayúdalos. Dales ejemplos de amor y misericordia con los demás. Sé amable y generoso y ama, ama, ama… porque si amas, Dios habita en ese hecho y transmites a Dios, que es Amor, al amar. Ama porque Jesús ama a todos, a los de cerca y a los de lejos, con tus comentarios, tu ayuda, tu gratitud. Ama…
Ama a los sacerdotes, porque en sus manos sucede el hecho más prodigioso de toda la creación. Ámalos porque necesitan corazones que los amen. Algunos son tentados de soledad, se sienten muy solos porque perdieron la memoria de que Jesús está siempre con ellos: en sus manos, en el Sagrario de sus Parroquias. Dicen que están solos porque no ven ni escuchan al Maestro. ¿Solos? son los hombres más acompañados de la tierra; nadie está más acompañado que ellos, Dios mismo en sus manos ya que, a sus ordenes, baja y está en ellas. Nadie los puede separar. Llegaron a sentirse solos porque vieron otras cosas: ven el poder de la Iglesia y piensan que es de ellos, ven el dinero de los fieles y se adueñan de ello, ven las alabanzas a los representantes de Jesús y las confunden con su persona… Tienen que purificarse para ser ejemplo de su Parroquia y permitir que el Señor lave la ropa sucia de la Iglesia. Habrá más porque inició esta traición Judas, pero Dios siempre lavará.
Una entrada para copiar, guardar, y leer cuando estamos tentados de criticar o juzgar. Una bella entrada Maribel.para recordar que la humanidad de nuestros sacerdotes, necesita de nuestra compañía , de nuestro respeto y de nuestro amor. Nuestra presencia junto a ellos, hará que jamás se olviden que son sus manos las que nos entregan a Jesús y que el mismo Jesús, les estás pidiendo vestiduras limpias y corazón puro. Un fuerte abrazo
♥Sacerdote, cada día tus manos son la cuna de Jesús; en tus manos Dios cambia la sustancia del pan y del vino en la carne y sangre de Jesús; por medio de tus manos da la absolución de los pecados. Tus manos liberan, sanan, bendicen y perdonan. No lo olvides nunca."Despacio y con devoción, di, sacerdote, la misa. Que lo corrido y de prisa desdice a tu dignidad… ¡Y no sabes si será el último sacrificio! Haz como debes tu oficio y Dios te lo premiará." (Beato Diego de Cádiz)♥