Ama mucho, ama siempre, ama todo lo que Yo he creado; entonces tu alma volará a lugares que jamás has podido imaginar.
Ama la justicia para un mundo mejor que alabe y bendiga a Dios. Ama la paz para que tu alma sea casa de Dios. Ama la bondad que ves en tus hermanos para que Dios reine en la tierra. Ama la pobreza del desprendimiento de todo lo material y maligno para que la luz de Dios se refleje en tu rostro.
Ama sin cesar hoy para que te puedas salvar.
En el camino hacia Dios nos acompaña María 
«Ama y haz lo que quieras», S. Agustín
El secreto de todo bien es AMAR…..
Nunca nos saldremos del camino del Evangelio si vivimos amando.
No dejes de visitarme, que ya voy mejor de la tendinitis y tengo nueva entrada.
Un abrazo
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Que cosa tan bonita nos has puesto, un texto pequeño pero ¡ que grande!!, más cuando se ven tantos egoismos, envidias, odios…algo tan sencillo como amarnos unos a otros , empatizar con nuestro prójimo y seguro que no habría tanta maldad, saludos Maribel.