No busques en Internet lo que puedes encontrar dentro de ti. Viaja a tu interior y después difunde lo que viste, oíste,sentiste y percibiste a todo el mundo.
Búsqueda
Esta entrada fue publicada en Dios, Espíritu, Templo y etiquetada Corazón, Espíritu, vida espiritual. Guarda el enlace permanente.








EL AMOR DE DIOS…